BLOQUE III. OBESIDAD, ¿quién es el culpable?

Introducción - Obesidad, ¿quién es el culpable?

La obesidad en el mundo no para de aumentar. Podría enlazar datos, gráficos y estudios que lo confirman, pero me parece que estaréis cansados de escucharlo. En España la situación actual de obesidad es mala y se pronostica que irá a peor. Posiblemente si te paras a pensar un poco, dirás ¿cómo es posible? Si la formula es sencilla: come mejor y haz más ejercicio, ¿no? En este caso, como en muchos otros, del dicho al hecho hay un trecho. Además, es un problema bastante más complejo y de origen multifactorial. De no ser así, ¿cómo es posible que en todo el mundo no haya dejado de aumentar la obesidad en los últimos 40 años? El problema de la obesidad no tiene una solución sencilla y se ha convertido en un problema de salud pública que requiere la intervención del Estado (gobiernos) en términos de proteger al ciudadano. Se ha de poner coto a determinados productos y formas de envasado, gravar con impuestos los productos insalubres, mejorar y delimitar la publicidad alimentaria en productos para niños, fomentar y promover la educación alimentaria en las etapas tempranas de la educación, mejorar el etiquetado nutricional para hacerlo más comprensible y útil... y un largo etcétera de propuestas que no se cumplen o llevan a cabo a pesar de la "aparente" buena predisposición de la industria alimentaria. Algunos de estos temas se trabajarán en el bloque IV, relacionado con el etiquetado.

También, algunos de vosotros pensaréis que la genética juega un papel fundamental. Sí, algo interviene, cómo no. Algunos estudios hablan de que la predisposición genética puede explicar hasta el 30% de la obesidad. El resto está en nuestras manos. Las empresas alimentarias se empeñan en decirnos que los culpables somos nosotros. Qué debemos hacer más ejercicio. Que si haces ejercicio puedes comer de todo. Esto es una verdad a medias. La gente que hace mucho ejercicio (que además suele alimentarse mejor) puede permitirse el lujo de comer más variedad de alimentos y no engordar. Pero, ¿qué es mucho ejercicio? Sólo un pequeño porcentaje de la población llega a realizar, por desgracia, esa cantidad (e intensidad) de ejercicio. Pero a la industria no le interesa decir que sus productos provocan desajustes metabólicos que en el largo plazo nos hacen engordar. Ponen el foco y te culpabilizan a ti. Son numerosas las referencias que pueden encontrarse con estudios científicos subvencionados por empresas (tipo Coca-Cola) en los que se dice que el único problema es la falta de ejercicio físico. 

Por otro lado, está el estigma social que viven las personas con cierta obesidad en su vida diaria, las cuáles son catalogadas-estigmatizadas de perezosas, vagas, con poca iniciativa y nulo esfuerzo por superar su problema o cualquier otro. Además, durante la infancia y adolescencia (y también de adultos) son señalados en demasiadas ocasiones y objeto de burlas (en el mejor de los casos). Pero, volviendo al tema salud, ¿ser obeso es sinónimo de enfermedad?, ¿existe una obesidad saludable?, ¿una persona delgada puede estar enferma metabólicamente?, ¿la forma en la que se mide la obesidad (IMC) es adecuada?

Para finalizar y por contestar a la pregunta del enunciado, os paso a enumerar los principales culpables que considero hacen que la obesidad no deje de aumentar.

1. Elevado consumo de productos ultraprocesados.

2. Elevado consumo de productos ricos en azúcar, en harinas refinadas y almidones.

3. Bajo consumo de fibra en la dieta. Poca saciedad.

4. Entorno obesogénico que dificulta salir del bucle.

5. Gobiernos poco intervencionistas que no asumen el problema como debieran y que son presionados por el lobby alimentario para tomar sus decisiones. Falta de liderazgos fuertes que movilicen a la sociedad para luchar por mejorar nuestra salud (podéis hacer un paralelismo con la situación que estamos viviendo ahora con el Covid 19 en el que no ha existidio ningún plan de emergencia preestablecido, ni han existido presupuestos para luchar contra este tipo de "enemigo", ni medidas de prevención continuadas en el tiempo, etc. Lo que ocurre que la obesidad es algo a largo plazo y cuesta más el concienciarse. Esperemos que en el futuro algo cambie, también estará en tus manos).

6. Leyes permisivas con el etiquetado, la publicidad alimentaria y la venta de productos en cafeterías escolares. Existen algunas leyes pero se quedan en papel mojado. Leer por ejemplo el artículo 40 del punto 6 (página 25) de la Ley de Seguridad Alimentaria y Nutrición (2011).

7. Falta de ejercicio físico.

8. Falta de una adecuada educación alimentaria que aporte recursos formativos válidos para la mejora de la salud.
9. Aumento de comidas periódicas fuera de casa.

Aquí tenéis el bloque III.